Atrás quedó el Preolímpico de Mar del Plata. Ahora, la Selección Argentina de Básquetbol deberá pensar en el futuro: los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Aunque, quizás, haya que ir un poco más hacia delante, a lo que le espera al seleccionado luego del torneo que se disputará en la capital inglesa. Este grupo de jugadores, conocido como la Generación Dorada, logró llevar al básquet nacional a los primeros puestos mundiales, aunque a muchos de sus integrantes les queda pocos años de carrera, por lo que un recambio generacional en el equipo parece cercano e inevitable.


Otro que podría sumarse es Juan pablo Figueroa, de 25 años, quién vistió la camiseta de Atenas en el país y ahora está en el Pinheiros Sporting Clube de Brasil. Éste ya jugó en la selección, en varios sudamericanos y mundiales juveniles.

Con respecto a los aleros, están a la orden Nicolás Lauría, Nicolás Romano y Marcos Mata, de 23, 24 y 25 años. Lauría, nacido en Mar del Plata, juega en Peñarol y fue uno de los protagonistas de la pasada liga lograda por los dirigidos por Sergio Hernández. Mata, compañero de Lauría, estuvo presente en Turquía, mientras que Romano fue parte de los que entrenó Enrqiue Tolcachier en Guadalajara, junto con los otros dos.
Entre los Ala-Pivot, los apuntados por Julio Lamas son Leonardo Mainoldi y Marcos Delía. Mainoldi, de 2,02 metros y 26 años, compite en la Liga ACB de España, en el Funlabrada. Fue bronce sudamericano y panamericano con Argentina, en Caracas 2006 y Rio de Janeiro 2007, respectivamente. Delía, por otra parte, está en el equipo de Boca Juniors y fue uno de los mejores jugadores nacionales en los Panamericanos 2011. El de 19 años, nacido en Saladillo, posee una gran potencia física y su altura es considerable: 2,06 metros.

En cuanto al rendimiento de la Selección Argentina en los Panamericanos, el que dirige a Obras declaró: “Estoy satisfecho con el juego colectivo que desarrolló el equipo, pero no con el resultado final. Si se ganaba el primer partido con Canadá, hubiésemos estado en las semifinales. Fuimos con un plantel joven y con futuro porque la fecha del certamen conspiró con la posibilidad de llevar a otros jugadores con mayor experiencia como Juan Pablo Figueroa y Leo Mainoldi. Por eso tomamos a los Panamericanos como un banco de pruebas, pensando en el Sudamericano del año próximo y en el recambio de los mayores".Además, Julio admitió sus deseos de estar en dicho torneo, pero sus tareas al mando de la mayor y de su equipo en la Liga Nacional no se lo permitieron.
Luego del primer objetivo del equipo, que es Londres 2012, se deberá pensar en los jóvenes talentos que deberán suplantar a la mejor camada que tuvo el país en este deporte. Aunque suena muy difícil que los futuros basquetbolistas logren todo lo que Luis Scola, Andrés Nocioni, Oberto, Ginóbili y los demás hicieron, puede pensarse en que con trabajo, dedicación, planificación y orden es posible construir un equipo prometedor.